jueves, 30 de octubre de 2008

Entrada forzosa

Escribo esta entrada obligada por las circunstancias. O lo que es lo mismo, obligada por mi promesa de escribir cada día. No sé por qué me hago este tipo de promesas a mí misma, cuando soy la primera que sé que la constancia no es lo mío. En realidad soy más del estilo "lo haré cuando esté inspirada", "aún hay tiempo" o, "trabajo mejor bajo presión". También autoengaños, pero me dan menos trabajo.
Ayer visité a Anna en Colonia. Es una mujer encantadora, ojalá hubiera más personas así. Protagonicé toda una pequeña odisea para llegar al tren que me llevó a verla, pero eso ya empieza a ser típico en mí. Realmente tengo un problema con las citas y datos importantes, y ese problema ya me empieza a minar. Pero creo que lo puedo superar o, al menos, sobrellevar.
Finalmente, me he dado cuenta de que quiero escribir textos más limpios. Creo que un texto para este formato debe ser breve, conciso, y limpio. Y yo no suelo conseguirlo, aunque es posible que llegue a ello con la práctica. También podría echarle un vistazo más frecuentemente a la página de mi colega Rafa, pues él lo está haciendo bastante bien y creo que puedo aprender mucho de él. Claro que él sí que es constante, no como otras...

No hay comentarios: